POR LA SECUELA DEL AÑO 2020 Y POR EL FUTURO CUIDADOSO DEL AÑO 2021.

Para todos fue duro, para todos fue gracioso (en algunos momentos) y para todos fue un año inolvidable.

Un año de alegrías cuándo inició y un año de tristezas cuando la muerte llegó, un año de

recuerdos con ansias de olvidos, un año donde la navidad no puede ser celebrada en su

completitud por la ausencia de cada ser querido que partió dejándonos su rostro y conservando lo último que nos dejó.

Un año donde la tolerancia se hizo notar, donde los valores se degradaron aún más, donde los insultos, la soberbia y la violencia se hizo notar, un año donde la prevalencia y la valentía marcó, la debilidad falleció y la salud mental decayó.

Un 2020, que no fue agradable para nadie, porqué, aunque no a todas las familias se les fueron seres queridos, muchas quedaron sin empleos, sin alegrías obtener regalos sin actitud para promover y cerrar un feliz año.

Un año 2020, donde el ciclo social cambió, donde lo vital se convirtió en la protección individual y social. Un año donde lo social mostró realmente su presencia, donde la familia representó unión y donde se dispara la lista de compromisos y plan de trabajo para el próximo año que viene sin mentalidad y con mayor eficacia y razón.

Un 2021 que genera advertencias hacía las grandes secuelas, tristezas y traumas en cada

corazón, no es una leyenda de advertencias, es una leyenda del pasado desangrado, el presente lleno de recuerdos y el futuro con cuidados por los que nos aman, por los que amamos y debemos cuidar y proteger.

Por una proyección de cambios necesarios y urgentes en cada ser, por eliminar la esclavitud

de las funciones que no son del agrado y aumentar la independencia al generar nuevos

cambios, nuevos compromisos y nuevos momentos.

Momentos de apoyo, momentos reales y momentos emotivos, momentos honestos, momentos nuevos y momentos como familia, por el mundo y para el mundo.

Que las alegrías y grandes anhelos que se tenían proyectados para este año 2020, se

multipliquen en cumplimientos y felicitaciones propias para el año 2021, que los errores

cometidos, la soberbia y tanta hipocresía puedan ser eliminados para empezar con un nuevo entorno que alimente, que sea la fuerza, que sea ejemplar, que sea con carisma, que valga la pena estar.

Que el año 2021, no empiece con negativismo, que empiece con emoción, que empiece con

la fe y calma, por aquellas personas que ya no nos acompañan, y que desde donde quiera que estén nos brindan el apoyo y soporte para seguir dando los pasos en esta tierra, que nos saca sonrisas, nos saca momentos, nos saca recuerdos, nos mueve, nos mueve con incentivo y positivismo al por mayor.

Por las alegrías fallidas, por la felicidad momentánea y por los grandes frutos, que están por

venir, pese a la angustia a la dificultad, se brinda por un 2021 en el que a la fecha tenemos salud, mucha salud para nosotros y para los demás.

¡¡¡FELIZ AÑO 2021!!!

Estefanía Castañeda Ruíz.

Comunicadora Social y Periodista.