ME IMAGINO

Me imagino,  sólo me imagino, me imagino, me imagino tus intenciones, imagino tus emociones, sentimientos y deseos, imagino solo imagino.

Imagino los momentos, los deseos, imagino los recuerdos que surgirían a través de hermosas acciones, acciones que marcan, que generan una tendencia en cada ser, como una especie de patrón, algo que no permite marcar una regla, ni muchísimo menos una imponencia, o una manera de dominio sobre el otro.

Tan sólo me imagino, a veces imaginarse no es pecado, son sólo patrones de deseos en el subconsciente qué sólo permiten transitar momentos inolvidables, y prevenir momentos no tan agradables, o tal vez personas no tan deseables, pero tan sólo me imagino algo diferente, algo transparente, algo sensato, algo que, si llega a ser transitorio será de aprendizaje, pero lleno también de imaginaciones en aquellas acciones presentes que solo serán pasajeras, pasajeras, pero con grandes reflexiones.

Así que solo me imagino, me imagino, lo que se considera inalcanzable, pero que a la vez y con las grandes capacidades y talentos, se pueden hacer posibles cambios, cambios inigualables e inolvidables.

Así que solo me imagino.

Estefanía Castañeda Ruíz

Comunicadora Social y Periodista

Especialista en Comunicación Organizacional