LOS NEGOCIOS NO SE MEZCLAN CON LAS SÁBANAS

Los números no seducen, los números centralizan, la mente dirige, el gusto atrapa, la concentración se intenta diluir, las observaciones empiezan a aumentar, las constantes preguntas se vuelven un diluvio, las objetividades no pueden perder su rumbo, el segmento y el seguimiento de la meta debe ser intacto.

La concentración debe influir con el alma pero objetivamente, el sentir, el deseo, y el amor es totalmente diferente a los números,  a lo financiero, a lo objetivo, allí no entran los sentimientos, no se confunden las acciones, con las decisiones, ni con los objetivos, las ganancias son aparte de los besos y las conquistas, las relaciones interpersonales son diferentes a las laborales, los negocios son centrales, son justos, críticos, limpios, no mezclan, son serenos, eficaces y efectivos.

El negocio del dinero, no se toca ni se mezcla con el amor, el alma y la pasión, no se insulta la inteligencia como tampoco se confunde con amor.

Estefanía Castañeda Ruíz

Comunicadora Social y Periodista

Especialista en Comunicación Organizacional

Estefanía Castañeda Ruíz

Comunicadora Social y Periodista

Especialista en Comunicación Organizacional